¿Qué significa ser libre?

En una sociedad que se vende a diario como abierta, tolerante y que enarbola la bandera de la libertad como sinónimo de su progreso,  asistimos con más frecuencia de la deseada, a un incremento de demostraciones de limitación de libertades que al alcance de los logros de los que se prodiga. Es precisamente este contraste el que nos conduce a preguntarnos: ¿Somos realmente libres?¿Qué quiere decir ser libre? ¿La libertad es hacer lo que queramos cuando queramos? incluso ¿Somos libres cuando "decidimos" si no podemos escoger las opciones entre las cuales "elegimos"?.

Quizás porque pensamos que parte de eso que llamamos "ser libre"  pasa por la posibilidad de hacernos preguntas,  decidimos hablarles hoy de  "Lo que tú quieras", el nuevo título de la colección de filosofía visual para niños Wonder Ponder. Un trabajo cuidado, inteligente, motivador y, nos consta, árduo y apasionado, que seguimos desde su primer título Mundo Cruel  y con el que compartimos concepto, estética y claro, filosofía.

Para nadie es un secreto que este mundo que vivimos, dificulta cada vez más la posibilidad de crear pensamiento crítico. Las imágenes, la rapidez y la intermitencia de la información que recibimos sensorialmente nos impide a l@s adult@s -imaginen pues a los niños-, digerir con los tiempos necesarios todo ese vasto volumen de contenido. En conclusión: es complicado pensar con autonomía dentro del estridente ruido que nos rodea y, mucho más difícil aún, crearnos una matriz de opinión propia. Nos ocurre a los adultos en el trabajo, en la calle y probablemente a nuestros hij@s, en las escuelas. Les propongo un ejercicio rápido: Pensemos en las veces que, tras una pregunta de nuestr@s hij@s, aprovechamos la ocasión y les ofrecemos espacio (y tiempo) para responderse a sí mismos con la sencillísima invitación de un "¿tú qué crees?"... seguro no serán muy abundantes.

Parece que todo y en todos los ámbitos, se nos inquiere a llegar a una única respuesta (la correcta, además) y en semejante vorágine perdemos la oportunidad de forjarnos -y forjarles- el buen hábito (en desuso) del cuestionamiento y la reflexión... Es por todo esto que Wonder Ponder y obras como "Lo que tú quieras"  no sólo son importantes sino indispensables. 

Las pausas -entendidas como tiempo para reflexionar y pensar- no sólo son necesarias en el proceso de maduración y conformación del sentido crítico, las pausas se requieren para poder convertir las imágenes que nos bombardean, en palabras, en ideas, en razonamientos que conformarán en nosotros la manera de interpretar, entender y, sobretodo, actuar en el mundo y, si me permiten la insolencia, actuar para cambiarlo.

Defender la libertad pasa por preguntarnos qué significa eso de ser libres. Y la invitación que nos hace esta vez Wonder Ponder  no es sólo acertada, sino que debiera ser, para beneficio de todos, inevitable. Sin moralinas ni juicios preconcebidos, Wonder Ponder es una invitación genuina para "abrir, mirar y pensar".

Es, sin más, una puerta cuidadosamente escogida a la(s) interrogante(s), Wonder Ponder logra una vez más, abrir una ventana valiente que nos invita a jugar a cuestionarnos y a pensar en respuestas, así en plural, porque ciertamente el riesgo (maravilloso) es llegar a la conclusión de que no hay sólo un camino o una única respuesta "adecuada", sino que, sea cual fuere, ella nos pertenece.

Hasta la próxima!